¿Era necesario un Día Internacional de la Mujer o se trata de un exceso feminista?

En mi opinión, era absolutamente necesario establecer un Día Internacional de la Mujer. En mi opinión, era absolutamente necesario establecer un Día Internacional de la Mujer. Así lo entendió la ONU, que desde 1975 lo institucionalizó para...

8 de marzo, 2018

RHT

En mi opinión, era absolutamente necesario establecer un Día Internacional de la Mujer.

En mi opinión, era absolutamente necesario establecer un Día Internacional de la Mujer. Así lo entendió la ONU, que desde 1975 lo institucionalizó para que fuera celebrado el día 8 de marzo. Y era de verdad necesario, en un mundo patriarcal y lleno de prejuicios, reconocer a nivel internacional la plena igualdad de la mujer y del hombre.

En pleno siglo XXI sigue habiendo discriminación por razones de sexo, no digamos ya en países y culturas que por tradición degradan y denuestan a la mujer, sino aún en países que suponemos desarrollados. El largo y sinuoso camino que han recorrido las mujeres de todas las generaciones para hacer valer sus derechos, todavía no rinde frutos plenos. Y lo vemos en todos los ámbitos.

Tomemos por ejemplo el Premio Nobel: según datos publicados por la Academia Sueca, desde 1901 a la fecha 892 personas han recibido este premio. De este universo, sólo 48 mujeres han sido galardonadas: estamos hablando del 5.38%. Si esto no es una forma de discriminación, entonces no sé qué cosa sea la discriminación.

Podrá objetarse que conforme avanzan las décadas, hay más Premios Nobel otorgados a mujeres. Así, por ejemplo, entre 1901 y 1920 cuatro mujeres lo obtuvieron; entre 1921 y 1940, fueron cinco; entre 1941 y 1960 fueron sólo tres; entre 1961 y 1980 fueron siete; entre 1981 y 2000 fueron once; y de 2001 a la fecha han sido diecinueve. De todos modos el porcentaje sigue siendo mínimo. Son seis premios lo que se entregan: Física, Química, Medicina, Economía, Literatura y Paz. Generalmente suelen ser varios galardonados por disciplina, excepto Literatura, que ha sido otorgado desde hace varios años siempre a una persona. De 2001 a 2017 se han entregado 102 Premios Nobel. Sólo diecinueve mujeres lo han recibido: 18.62%. Sigue siendo un porcentaje minúsculo. Y, para acabar con el asunto, en la última entrega del premio, fueron once los individuos galardonados, y entre ellos no hubo una sola mujer: ¡ni una sola! O de verdad no hay mujeres suficientemente talentosas que merezcan el premio a la par de los hombres (y entonces, hipotéticamente se confirmaría que son mejores los hombres que las mujeres, al menos en estas seis disciplinas), o la Academia Sueca es un club de Toby que discrimina a las mujeres. ¿Cuál de estas dos posibilidades tiene más sentido? Suponer que los hombres son mejores en Química, Física, Economía, Medicina y Literatura que las mujeres, y que por eso reciben más premios, es una suposición aberrante.

Al hablar del Premio Nobel y de la Academia Sueca, estamos hablando de personas cultas y educadas; hablamos de uno de los países más civilizados y avanzados del mundo, ejemplo para muchos; hablamos de los grados más altos que ha alcanzado la civilización a lo largo de la historia. Si ahí notamos este desequilibrio entre hombres y mujeres, ¿qué podemos esperar en otras latitudes?

Hace unos meses, en la conmemoración del aniversario de nuestra Constitución, el podio estaba integrado sólo por hombres. ¿Dónde están las mujeres? La foto fue una vergüenza. Nuestro país está todavía muy lejos de alcanzar la plena igualdad de las mujeres. Por eso es necesario resaltar un día como hoy, un Día Internacional de la Mujer. No es, como algunas feministas extremas piensan, una especie de dádiva graciosa, mucho menos un día tan cursi como podría ser el día del amor y la amistad, un día en el cual hay que consentir a las mujeres, invitarlas a comer o a cenar, u obsequiarles algún regalo. Eso sí que sería una caricatura del Día Internacional de la Mujer. Este día es muy especial porque en él se hace reconocimiento de la plena igualdad entre hombres y mujeres y se reconoce la lucha de ellas a lo largo de la historia para conquistar sus derechos; es además un día para repudiar la discriminación y para rechazar la cultura patriarcal que, hoy por hoy, ya no debería tener cabida en nuestra sociedad.

Hoy es un día para celebrar y exaltar la feminidad, para subrayar la plena igualdad de los sexos y para reconocer la lucha histórica de todas las mujeres en la conformación de un mundo mejor. Sé que algunas mujeres no estarán ni contentas ni de acuerdo; lo cual es triste, pues revela un menosprecio de la historia. Hoy celebramos y conmemoramos la igualdad de lo sexos. Esta igualdad es un hecho, no una concesión: es propio de nuestra naturaleza, y por eso duele mucho que durante casi toda la historia el sexo masculino haya aplastado a la mujer –y aún hoy siga ejerciendo violencia contra ella–. Por eso hoy celebramos la emancipación que con justicia las mujeres mismas han conquistado o están en vías de conquistar, al menos en los países libres.

Es, pues, absolutamente necesario celebrar el Día Internacional de la Mujer.

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