De Frente Y Claro | MENTIRAS Y ENGAÑOS CON EL FONDENDe Frente Y Claro |

Los huracanes y temblores no se pueden predecir, pero lo que sí puede y debe de hacerse es diseñar estrategias para proteger a los sectores vulnerables.

2 de noviembre, 2023

Carlos Aguila Franco

En la nefasta administración de López y su 4T siguen predominando las mentiras y los engaños. Y ante la tragedia acontecida por el huracán “Otis” el 25 de octubre del 2023, que prácticamente destruyó el Puerto de Acapulco la semana pasada, salió a relucir el tema del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) que en el 2021 López y la SHCP anunciaron que desaparecía. Y ahora resulta que siempre no. Importante saber cuál es la cruda realidad

SÍ HAY FONDEN

El pasado 25 de octubre del 2023 el subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, afirmó que México cuenta con recursos por seguros y bonos catastróficos para enfrentar los daños por desastres naturales como el huracán Otis. Explicando que: “Lo que se retiró, sobre todo, del administrador del Fonden, que era Banobras, es el sistema de gestión financiera pública (…) lo que se hace ahora es que se centralizan y se transfieren los recursos a los ejecutores que pudiesen ser la Sedena, se activa el plan DN3 o cualquier otro ejecutor como un estado”.

Destacando que la cobertura de reserva de efectivo de este fondo no fue tocada, y que, además de los 18 000 mdp, hay una línea presupuestal de cerca de 10 000 mdp. También hay 5000 mdp en seguros catastróficos que se contratan cada año, para atender emergencias por desastres naturales. En tanto, se cuentan con otros 485 millones de dólares por el bono catastrófico que México tiene junto con la Alianza del Pacífico, que consta de diversificar riesgos con Perú, Colombia y Chile. La cobertura de la reserva de efectivo y los seguros paramétricos para desastres se ha mantenido intacta y la hemos renovado en cada ciclo presupuestal.

DESAPARECIÓ EL FONDEN

Pero si eso fue así, entonces por qué López, que siempre tiene otros datos, afirmó lo siguiente el 8 de septiembre del 2021: “Desaparece el Fonden, porque lo que queremos es desaparecer la corrupción en México, pero eso no significa que no se atienda. Fíjense la perversidad de estos conservadores corruptos, desaparece el Fonden, entonces ya el gobierno no atiende a los damnificados: los estamos atendiendo mejor que nunca a los damnificados”.

Lo anterior lo señaló en base a que el 28 de julio pasado, la Secretaría de Hacienda (SHCP) oficializó la desaparición del Fondo de Desastres Naturales (Fonden), creado en el gobierno del priista Ernesto Zedillo, en 1996, para ayudar a las poblaciones afectadas por fenómenos naturales. Razón por la cual López justificó su decisión afirmando que “era la caja chica” del gobierno, de la que funcionarios se despachaban con miles de millones de pesos: “El Fonden era un barril sin fondo, en cada emergencia se robaban 1,000; 2,000; 3,000; 5,000 millones de pesos”.

Y aclarando López que ahora la ayuda del gobierno se realiza a través de censos directos, en los hogares que se han visto afectados como sucedió con las inundaciones en noviembre de 2020 en Tabasco y en agosto de 2021 en Veracruz. A las personas que resultaron afectadas se les entrega despensas y electrodomésticos. Sin el Fonden, hoy el gobierno está ayudando más que en otras ocasiones. Además, puntualizó que los señalamientos en contra de la desaparición son de sus opositores, que no han logrado frenar a su gobierno.

¿HAY FONDEN O NO? LA CRUDA REALIDAD

Importante lo que Adriana Hortiales, Analista en Finanzas Públicas externó en el programa “Agenda Pública”, sobre la problemática de los desastres naturales y que pasó con el Fonden. De entrada, destacó que debe hacerse una diferencia entre el Fideicomiso Fonden y el Programa Presupuestario, porque el Fideicomiso, como todos los Fideicomisos funciona, para que los recursos que no se ejercieron durante un año fiscal a través del Programa Presupuestario se reintegren a este Fideicomiso y generen un rendimiento y en el siguiente año o en años subsecuentes se continúe administrando el recurso a los estados.

Agregando que en el 2020 cuando López decide desaparecer los Fideicomisos, también entra el Fonden, pero en ese año se contrató el Bono Catastrófico y el seguro Fonden, estos dos mecanismos necesitaban une entidad donde se depositara el recurso en caso de que se usaran estos recursos. Por ello el Fideicomiso se tiene que mantener porque el Bono Catastrófico se contrata por cuatro años más. Esto indica que el Fonden como figura jurídica jamás desapareció,

Y que en el 2021 a pesar de que la extinción comienza en 2020, el Fideicomiso aún tenía recurso, alrededor de 27 mil millones de pesos, que en pesos de hoy en día son 33 mil millones. Pero para el 2022, esos millones ya no los vemos, dado que los movieron a otros programas sin saber a qué Programas. Por ello queda vacío y si con este huracán se obtiene lo del seguro, llegará a este fideicomiso, para que lo administre hacia el Programa Presupuestario y éste lo distribuya a las entidades.

En este 2023 solamente se aprueba el Programa Presupuestario y nació con 17 mil millones, y estando ya cerca de terminar el año, esta cantidad Hacienda la modificó a 13 mil millones, pero se han gastado alrededor de 6 mil millones de pesos, y quedarán solamente un poco más de 6 mil millones disponibles.

Pero estimados lectores, se calcula que la recuperación de Acapulco costará cerca de 15 mil millones, pero DE DÓLARES, que equivalen alrededor de 300 mil millones de pesos.

En esta línea, López afirma que hay fondos ilimitados para apoyar al Puerto de Acapulco, lo cual es irreal, porque los habría si fuese inicio de año, pero estando ya en el mes de noviembre del 2023, y en el mes de octubre la Secretaría de Hacienda elabora ya el cierre del año, es decir ya no hay recursos. Siendo muy poco lo que quede disponible quizás un 20 por ciento del presupuesto, ya está comprometido.

Y los Fondos a los que se refiere como lo son los 485 millones de dólares que se podrían cobrar del Bono, no es tan cierto ya que habría que saber cómo se especificó en el documento que se firmó, porque los seguros no cubren en automático y dependen de diferentes variables.

El bono cubre terremotos y huracanes, en el caso de los terremotos tienen una intensidad. En el 2017, con el terremoto, fue la única ocasión en que México cobró en su totalidad este Bono y una sola vez, dado que se especifica que solamente se cobra una vez en un periodo. Y no olvidemos que en el 2017 hubo dos temblores y únicamente se pudo cobrar en uno.

Y en cuanto al huracán “Otis”, si la presión atmosférica es menor a 932 milibar, se cobrará el 50 %, si es menor a 920 milibar, se cobra el 100%. Recordando que con el Huracán “Patricia”, en octubre del 2015, que afectó los estados de Michoacán, Colima, Jalisco, Nayarit, se cobró el 50%. Y con el huracán, “Odile”, afectando la Península de Baja California Sur, en septiembre del 2014, que fue muy parecido a “Otis” en octubre del 2023, a pesar de que llegó a 940 Milibar, no se cobró nada. Razón por la cual no deben presumir que se contará con ese recurso en este 2023.

Lo acontecido en el Puerto de Acapulco nos lleva a recordar que existe una La ley de Prevención de Desastres Naturales que debió implementarse en el 2020, pero ahí se quedó congelada. Esta Ley se aboca a coordinar a todos los entes del gobierno ante un desastre natural, pero la dejaron en el cajón sin implementarla.

Es por ello que y lo acontecido muestra y demuestra que en el país no hay coordinación para enfrentar este tipo de siniestros, en que deben intervenir no solamente el Ejército Mexicano, la Marina, sino las Secretarías de estado, convocados por el Presidente de la República, para que, con ellos como ejecutores de gasto, diseñar una estrategia junto con las autoridades locales.

Porque se requiere una Ley que en casos como el de Acapulco, especifique que debe hacerse paso por paso y en tiempo record acorde a la magnitud del problema. Pero esta Ley existe, pero no la implementan, no lo hacen y mucho menos les importa a López y su clan, que en este tipo de siniestros quienes los más perjudicados siempre, son los sectores más vulnerables, mexicanos en pobreza, enfermos, con discapacidad, personas de la tercera edad, niños.

Los huracanes y temblores no se pueden predecir, pero lo que sí puede y debe de hacerse es diseñar estrategias para proteger a estos sectores vulnerables para que se disminuyan los riesgos ante desastres naturales.

Como colofón, hay que recordar que cuando se eliminaron los fideicomisos y le tocó al Fonden, porque si bien jurídicamente no lo desaparecieron, si quitaron sus recursos. Y se les hizo la advertencia que si se presentaban desastres naturales NO HABRÍA CON QUE ENFRENTARLOS, dado que no es lo mismo contar con recursos destinados para ello, que solamente tener lo poco que le pongas en ese año y no habrá nada más. Como está sucediendo en este 2023 con el huracán “Otis” en el Puerto de Acapulco.

El Fonden tenía recursos equivalentes al 0.4 del Gasto Programable, que bien podría incrementarse para estar prevenidos y poder ayudar a los afectados.

Qué triste y grave que no hayan tenido ni la inteligencia ni la calidad humana para haber impedido la Ocurrencia de desaparecer los recursos del Fonden López y su 4-T, lo cual llevarán y cargarán en sus conciencias, junto con diputados y senadores lacayos que se lo aprobaron actuando como serviles empinados a las órdenes de su Patrón. Y por ello tengan que mentir y querer engañarnos cuando se presenta un desastre natural.

Por ello en el 2024 hay que tener mucha inteligencia para saber a quién le darán el voto, para que esto cambie, o siga peor que hasta ahora. ¡Debemos hacerlo por nuestras familias y por nuestro querido México!

Te puede interesar:

Acapulco y el Hipódromo… ¡A punto de desaparecer!

Comentarios