“CASA BLANCA” O MANSIÓN DEL BIENESTAR

Habiendo tantos problemas en México como la desigualdad, la inflación, la violencia, la pandemia… ahora el tema que acapara el centro del debate nacional es una casa en EEUU.

4 de febrero, 2022

Adilene Cortés Piza

Comenzó una guerra más entre los políticos. ¿La razón? La casa de José Ramón López Beltrán. No hay solución a los problemas de México: los pobres siguen en aumento, los precios por los cielos, pero lo más importante es investigar la procedencia de una casa.

México está cada vez más inmerso en la vergüenza y esto no tiene que ver con los datos económicos o los resultados tecnológicos, lo que avergüenza es la actitud de los políticos ridículos que no tienen pena y solo piensan en ellos. La nueva disputa ahora es la procedencia de la casa de José Ramón López Beltrán porque es hijo del presidente Andrés Manuel López Obrador. El delito es el lujo de la casa donde vive y un supuesto conflicto de interés por contratos relacionados a Pemex. ¿Dónde está lo extraño? Dudo mucho que el empresario Carlos Slim viva en la sierra de Oaxaca o en la parte más pobre de Guerrero, dudo mucho que Marko Cortés, presidente del PAN, viva en Valle de Chalco.

El punto en este caso es que es vergonzoso gastar energías en acusaciones de este tipo cuando México tiene tantas necesidades que son realmente importantes. La oposición tiene la obligación de exigir resultados al gobierno federal, ser un contrapeso para evitar que el gobierno en curso se pierda, generar propuestas que sumen pero en México, la oposición es inútil.

No es la primera vez que sucede algo similar. La administración de Enrique Peña Nieto fue señalada por la “Casa Blanca” y todo se solucionó cuando Angélica Rivera montó un show asegurando que compró esta casa con el esfuerzo de su trabajo en Televisa y entonces todos callaron. Ahora surge Carlos Loret de Mola con la primicia sobre la casa del hijo del presidente de México que realmente es una casa promedio en Estados Unidos. Vergüenza le debería dar a los políticos decir que es una casa lujosa porque en México el dinero no alcanza para tener alberca ni para hacerla de más pisos.

Como mexicanos nos interesa que se resuelvan los problemas de México como el empleo y José Ramón López Beltrán no es el presidente del país. Estoy completamente de acuerdo en que no sería justo que él sea rico a costa de los mexicanos y que debe ser juzgado en caso de haber cometido algún delito; pero lo que no es aceptable es que el tema sea usado políticamente. Ricardo Anaya no vive en México e intentó ser presidente, ¿el PAN lo denunciaría por tener casa en Estados Unidos y tener una mejor casa que cualquier mexicano promedio? Políticos, ya dejen la ridiculez y pónganse a trabajar, cuiden el dinero de los mexicanos pero de manera correcta y por los medios adecuados, dejen de pensar sólo en sus intereses.

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