Asamblea General Politécnica

5 de noviembre, 2014

Kenia López Rabadán

Desde el pasado 17 de septiembre, los estudiantes de la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura de la Unidad Zacatenco del Instituto Politécnico Nacional notificaron a la comunidad mexicana que se realizaría un paro de actividades en dicha escuela, por la aprobación de nuevos planes de estudio que afectaban a los estudiantes de esas carreras.

Sin embargo, hasta el 25 del mismo mes, tras la conclusión de los trabajos de revisión y aprobación del Consejo General Consultivo del IPN, en el que se aprobaron las reformas al Reglamento Interno de la casa de estudios y a los Planes de Estudio de las diversas carreras, la comunidad estudiantil de las 15 vocacionales y de las 25 escuelas superiores, llamaron a un paro general, y convocaron a la Mega Marcha del 30 de septiembre que partió del Casco de Santo Tomás a la Secretaría de Gobernación.

Sin lugar a dudas, fue una de las marchas más emblemáticas que se han suscitado en los últimos tiempos, ya que no se permitió que acudiera ninguna persona ajena a la institución académica, portando sus credenciales de estudiantes en mano, además de que personalmente el Secretario de Gobernación recibió el pliego petitorio conformado por diez puntos, comprometiéndose a analizar y llegar a acuerdos de lo dictado en dicho documento:

Cancelación total del Reglamento Interno aprobado el 25 de septiembre.
Cancelación de los planes de estudios que tecnifican la educación superior y reducen la calidad educativa de las escuelas de nivel medio superior.
Destitución y desconocimiento de la Dra. Yoloxóchitl Bustamante Diez como Directora General del IPN.
Salida de los elementos de la Policía Bancaria e Industrial de las instalaciones del Instituto.
Cese de pensiones vitalicias a ex Directores del Instituto.
Democratización del Instituto, iniciando un proceso de representación equitativa de estudiantes, docentes, trabajadores de apoyo y autoridades en cada uno de los Consejos.
Garantía de no represalias académicas, administrativas o legales hacia ningún miembro de la comunidad politécnica participante.
Aumento al presupuesto federal otorgado al IPN y a los sectores educativos públicos y de investigación científica y tecnológica.
Dar a conocer todas las formas de injerencia del sector privado en el IPN.
Retirar a los grupos porriles del Instituto.

Derivado de la mega marcha, la Dra. Bustamante Diez presentó su renuncia al cargo de Directora General el día 03 de octubre, noticia que se hizo de conocimiento a los estudiantes por el propio Secretario de Gobernación, sin embargo, los estudiantes emitieron un comunicado en el que solicitaron dar puntual cumplimiento a su pliego petitorio, ya que se consideró que las respuestas emitidas eran incompletas e imprecisas. Por tal motivo, la SEP reconoció la necesidad de analizar los problemas por los que atraviesa el IPN y propuso organizar una mesa de diálogo público con funcionarios del gobierno federal y el Congreso Nacional Politécnico.

Tras 41 días de paro, el día de ayer, 4 de noviembre, se realizó la mesa de trabajo en el Auditorio Alejo Peralta del Centro Cultural Jaime Torres Bodet del Instituto Politécnico, a la que acudieron 15 funcionarios públicos, entre ellos el Subsecretario de Educación Superior Fernando Serrano Migallón, así como representantes estudiantiles. Después de casi tres horas de diálogo, se acordó realizar dos mesas más los días 6 y 7 de noviembre en las mismas instalaciones para abordar la designación del Director, el presupuesto asignado para la educación pública y la solución a la violencia ocasionada por los grupos porriles.

Pese a la insistencia de las autoridades por reanudar clases, los estudiantes mencionaron que después de realizar estas mesas, y de analizar en cada escuela los acuerdos, se podrá definir una fecha para que los más de 171 mil estudiantes, más docentes y empleados se incorporen a sus actividades y así poder concluir el semestre.

Este movimiento de estudiantes politécnicos ha recibido apoyo de universidades como la UNAM, la UAM, así como de universidades y escuelas de todo el país, dando origen a la Asamblea Nacional Interuniversitaria, lo que demuestra que los estudiantes mexicanos no sólo ejercen su derecho a la educación, sino que también exigen a las autoridades respuestas prontas y claras a las diferentes problemáticas que enfrentan día a día como comunidad. Y en esta búsqueda de soluciones, los días 5, 6 y 7 de noviembre, diversos planteles de la UNAM, IPN y UAM realizarán un paro nacional estudiantil, a la que se unirán también organizaciones campesinas y sindicales para exigir se aclare la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Guerrero.

Esto demuestra sin duda, que el Gobierno federal tiene uno de sus máximos restos de manera simultánea, dar certidumbre de seguridad a los mexicanos y esperanza de futuro a los jóvenes. El reto no es menor y los obstáculos son muchos.

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